jueves, junio 16, 2005

REQUIEM

Vino al mundo a mediados de Febrero de 1988, junto con otros 5 hermanitos. Su mamá la "Pancha", una gatita que año tras año poblaba el barrio de mininos.
Una tarde de Marzo del mismo año, Martita me comenta
-"tengo a tu próxima mascota, vení a conocerla"
-"mirá, es aquel, el rubiecito, el primero en salir de la madriguera, y el más corajudo para conocer el mundo".

Ahí lo vi y me enamoré, saltando tras los insectos, jugando con cualquier cosa que se moviera; y si no se movía, entonces El la ponía en movimiento. :)

En casa mucho no agradó la idea de tener una mascota : "vivimos en un departamento, después quien lo va a cuidar, etc,etc.

El 3 de Abril lo fui a buscar pese a las opiniones en contra. Lo recuerdo pequeñito, asustado, dentro de mi campera de jean mientras subíamos por el ascensor.

Cabía en una cajita de zapatos. No tomaba leche y, en seguida nos dio a entender que tenía gustos epicúreos cuando de comida se trataba.

Desde el mismo comienzo que estuvo en la familia se destacó por no ser un gato "común".
Nada de "mishi, mishi" para llamarlo, no te llevaba el apunte. El respondía cuando le llamaba por uno de sus nombres: TOM.

Felinito irreverente como pocos, recuerdo su cara desafiante cuando le entraba con las uñas al sillón de mi dormitorio. :)

Millones de anécdotas con El, se convirtió en el centro donde todo giraba en el hogar. Compras en el super y había que traerle su carne picada de lomo ya que otra no comía. Vacaciones programadas en función de quién se quedaba a cuidarlo. Nunca lo dejamos solo más de 24 horas.

Compañero y mimoso, buscaba siempre estar en algún lugar elevado y calentito para observarnos. Estuvo en todos : la tv, el monitor de las pc's, el techo del bar de mi padre desde donde le cazaba las orejas, la heladera, las alacenas, los armarios, las cortinas, una alfombra enrollada, etc,etc.

Gato astuto para su especie. Nunca tierra, aserrín o piedritas fueron su baño. Mi felinito iba al baño, precisamente en el baño. Avisaba cuando tenía ganas y había que ir corriendo a encenderle la luz, avisaba cuando terminaba y había que volver corriendo para abrir la canilla. Nunca un mal olor, ni siquiera le conocimos gases.

Uff, se me vienen muchas cosas a la memoria y seguramente me olvide de muchas: su fascinación por las aceitunas que lo ponían en éxtasis, hojas con mis apuntes mordisqueadas en las esquinas porque estudiaba conmigo. Guerra contra mis lápices cuando intentaba escribir, o acostarse encima del periódico o libro que intentáramos leer. El tronquito que le trajimos para que afile sus uñas, mis ojotas (que prefería al tronquito).

Su plato y su tazón fueron los mismos que Yo usé de bebé. El era MI Bebé.

17 años y monedas estuvo con nosotros. La mitad de mi vida. Nunca me importó que me gasten bromas por tener un gatito. Mi "tigre de la Malaria" siempre reía al último.
Como cuando se cagó sobre un Sebas dormido de puro celoso, o cuando vigilaba a la novia que traje a dormir, perforándola con sus ojos.

Tom masticó el crucifijo de madera que le regalaron a mi hermano cuando se confirmó. Masticó flores, ramas de olivo y tumbó floreros del altar de la virgen de mi mamá. Se cansó de agujerearme remeras cuando no quería que lo tuviera alzado. Rayó mi vinilo importado de The Elder cuando calculó mal un salto. Se hizo pis en la campera de trabajo de mi papá. Destruyó con sus uñas el botinero de mi mamá y se comió el germinador que con tanto ahínco mi hermano había preparado. :)

Nos alegró la vida de una manera que no puedo describir con palabras.
Nos dio AMOR, si con mayúsculas, del bueno, del sincero, del que tantas veces cuesta encontrar. Es la criatura que mas veces he besado y abrazado. La que más noches durmió conmigo.

Hoy a las 14:10 hs se durmió en mis brazos. Una enfermedad incurable lo aquejaba y preferí que no sufriera. Como me dijo Juan (el vet, gracias hermano) es una manera de retribuirle tanto que nos dio.
Me dolió en el alma. Pero era preferible detenerle el sufrimiento.

Con mi bro lo envolvimos en mi camiseta preferida de Peter Criss, en su toalloncito que el mismo redujo a jirones. Lo sepultamos en la cima de una pequeña montaña a unos km de mi casa, con el cielo como testigo y manchones de nieve alrededor. Se llevó consigo uno de sus tazones, y el guante y el cepillo con que lo peinaba. Se llevó un gran pedazo de mi corazón también.

Trato de recordarlo con cariño pero la tristeza me embarga. Mi Tomcito
ya no está físicamente conmigo, pero sé que me está cuidando desde el cielo. Tengo ahora otro Angel de la Guarda. El mejor de todos, el más fiel y el más cariñoso.

Sé que en algún momento nos vamos a reencontrar, descansá en paz mientras eso sucede. GRACIAS POR TODO felinito!!



"Tomcito" Gómez
Feb 1988 / 16 de Junio 2005


P.D: Tom, te fuiste hace solo unas horas y ya te extraño. Visitame cuando me duerma, por favor...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo siento, me cuesta en estos momentos mucho escribir, sabes que estoy contigo, y ahora más que nunca. Que duro es vivir y compartir nuestro amor con los que nos rodean, se tienen que ir, y me duele en el alma.Lo siento en el alma, no puedo decirte más, la pantalla tb se me nubla por las lágrimas, hasta ahora tesoro.